Mercado La Cancha en Cochabamba |
Al llegar a Punata ya nos esperaba el Padre Beymar, en su parroquia, El Señor de los Milagros. Me recibió con mucha alegría y calidez. Apenas dejé mis cosas y lo acompañamos a dos eucaristías. La primera en Tajamar en una comunidad que mandó pedir una misa por una intención familiar. Después de la comunión una señora se me acerca y me pregunta algo, yo al no entenderle me encogí de hombros y le dije "no" moviendo mi cabeza. Al final Mery me dice con una sonrisa: "no sabía que hablaras quechua...". Eso lo explicaba todo, con razón no había entendido.
La segunda eucaristía a la que lo acompañamos, fue en Chirusi-Rosario, comunidad en las afueras de Punata. Era la fiesta de la Virgen del Rosario y todo el pueblo lo celebraba con procesiones, danzas con trajes típicos, como la diablada, cuetes, comida típica. Impresiona ver como los niños ya desde pequeños celebran su cultura con orgullo.
Mientras el padre celebraba la misa yo me complacía con un helado de canela, algo parecido a un granizado con hielo y con maní encima. El color del helado con el maní recuerda un poco a la tuba de Colima, pero éste era más rico con hielo. La señora que lo preparaba se reía con otra señora... les extrañaba que yo estuviera tomando video del helado y su preparación y se preguntaban, en quechua, de donde sería y por qué actuaba raro (después me tradujeron).
Hacia la tarde estaría en la primera oración de la visita en Bolivia. En Valle Bajo, en Quillacollo, ciudad muy cerca de Cochabamba animaríamos una oración con cantos de Taizé. Al llegar los jóvenes ya tenían todo muy bien preparado, la decoración del lugar con telas, velas e iconos, el coro con guitarra, flauta y violín, incluso ya ensayaban los cantos con los asistentes. La oración reunió a unas 60 personas en un clima de reflexión, canto y silencio. Al final una joven recordaba el encuentro de Taizé en 2007 en Cochabamba como "algo nuevo, pero muy lindo". Aun después de 3 años y siguen resonando ecos de la experiencia que trajo el encuentro para los jóvenes bolivianos.
Oración en Quillacollo |
No hay comentarios:
Publicar un comentario